
¿Cuánto tiempo tarda el tabaco en desaparecer de tu cuerpo tras dejar de fumar?
Como ya te hemos contado en anteriores ocasiones, la nicotina es una de las drogas más adictivas. A esto deberíamos añadir: y una de las que más tarda en desaparecer de nuestro organismo aún después de haber dejado de fumar. En gran medida, dependerá del tiempo que hayas sido fumador y la cantidad de cigarros consumidos al día, pero tal y como nos cuentan en ehowenespanol.com:
“Para los fumadores ocasionales, se queda en tu cuerpo de dos a cuatro días, pero con grandes fumadores, puede durar hasta unos pocos meses. Además, para las personas expuestas al humo de terceros (el humo del tabaco que los fumadores exhalan y que los transeúntes inhalan) la nicotina puede permanecer en tu cuerpo de 15 a 20 días”.
Para que te hagas una idea de cómo va respondiendo tu cuerpo ante la ausencia de tabaco, puedes seguir esta línea del tiempo:
Línea de tiempos
1) A los 20 minutos de dejar de fumar:
La presión arterial y el ritmo del pulso vuelven a la normalidad y, con ello, la temperatura corporal de las manos y pies.
2) A las 8 horas de dejarlo:
El cuerpo empieza a regenerarse, los niveles de monóxido de carbono en la sangre disminuyen y el nivel de oxígeno se incrementa. Logrando así mayor estabilidad.
3) A las 24 horas de dejarlo:
El riesgo de un ataque al corazón disminuye.
4) A las 48 horas de dejarlo:
Las terminaciones nerviosas se regeneran y los sentidos del olfato y gusto se incrementan.
5) A las 72 horas de dejarlo:
Los bronquios se relajan y aumenta la capacidad pulmonar, facilitando la respiración.
6) De 2 a 3 semanas de dejarlo:
Mejora la circulación y se hace más sencillo caminar. El cuerpo trabaja mejor y su rendimiento aumenta hasta un 30%.
7) De 1 a 9 meses de dejarlo:
Se incrementa la energía. Los síntomas como la tos, congestión nasal, fatiga y dificultad respiratoria mejoran. Los pulmones se están limpiando.
8) Al año de dejarlo:
El riesgo de cardiopatía coronaria se ha reducido a la mitad.
9) A los 5 años de dejarlo:
El riesgo de padecer cáncer de boca y pulmón se reduce a la mitad.
10) A los 10 años de dejarlo:
El riesgo de accidente cerebrovascular y cáncer pulmonar casi se igualan a los de alguien que nunca ha fumado.
Ahora que sabes esto, ¿por qué esperar más? Reúne toda tu confianza y da un paso al frente.